El contexto lo cambió todo: Nuestros trabajos, las maneras de comunicarnos y de vivir. Cambiaron los miedos y las maneras de acompañar y sentirnos acompañados. Nuestras garantías son otras y es aboslutamente esperable sentir ansiedades y temor en esta situación tan inédita que nos toca atravesar.
Pero quizás no ha cambiado el deseo de maternar/paternar (tener un hijo) y eso continua intacto.
Sabemos y entendemos que el Aislamiento Preventivo Social y Obligatorio extendido por el Gobierno Nacional se transforma en una nueva pausa a los tratamientos de fertilidad.
Un nuevo paréntesis, que nos deja sin muchas más posibilidades que esperar.
Comprendemos que las cuestiones que están fuera de nuestro control, quizás sean más difíciles de transitar.
Pero debemos entender que nos queda la enorme tarea de priorizar lo importante: cuidar nuestra salud física y psíquica.
Encontrar cuales son las herramientas que cada uno tiene para pasar este momento.
Sin tener muchas certezas, sabemos que esta situación en algún momento va a mejorar. Es decir, va a terminar y quedará para cada uno un recuerdo tan personal y único como la manera de vivirlo.
Los psicólogos que trabajamos en el área de fertilidad estamos disponibles para poder conversar, asesorar y contener estas situaciones.
Comprendiendo que, en esta ocasión los tratamientos se postergan , que aunque no podamos seguir en la dirección anhelada, hay movimientos que nos llevaran a encarar el nuevo tratamiento cuando sea posible y de la manera posible.”

LIC NATALIA KOHEN

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